martes, 30 de agosto de 2016

Cinco claves de la gestión financiera


¡Qué amplio llega a ser cualquier tema de conversación! La economía y las finanzas, como la política o el fútbol, despiertan pasiones o adormecen con tertulias y debates sin fin.

Entre lo mucho que cabe decir, argumentar y contraargumentar de finanzas, e independientemente de que cada persona somos un mundo y además desarrollamos etapas con diferentes perfiles financieros, existen unos conceptos e indicadores comunes a toda forma de vida financiera. Comunes y claves, como resume el vídeo a continuación, «Gestión financiera», elaborado por la DGIPYME (Dirección General de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa - Ministerio de Industria, Energía y Turismo) con la colaboración de la Escuela de Organización Industrial también del MINETUR:


«Conseguir que tu empresa tenga una salud de hierro es más sencillo de lo que parece. Nosotros te vamos a dar las claves básicas. Recuerda bien estas cinco palabras: contabilidad, análisis, tesorería, inversiones y compras».






Conceptos financieros e indicadores financieros


Los conceptos financieros, como los demás conceptos, son ideas y realidades plasmadas en definiciones. Por su parte, los indicadores son relaciones entre conceptos, o razones, en el sentido matemático, como expone Marbelis Nava en su artículo dedicado al análisis financiero como herramienta de gestión financiera.

Unos y otros, conceptos e indicadores, tienen un buen escaparate en los glosarios que publican los sitios web de formación de las entidades financieras. Estos glosarios son instrumentos útiles de conocimiento de la realidad financiera y también de comprensión, ya que nos introducen en su lenguaje y realidad específicos. La claridad y la síntesis son sus características.

Los siguientes glosarios proporcionan una buena base de conceptos e indicadores financieros:

Glosario elaborado por Finanzas para todos (Plan de Educación Financiera de la CNMV y Banco de España). Casi 400 términos relacionados con el ahorro, la inversión y la gestión.

Glosario general (Banco de España).

Glosario Billetes y Monedas (Banco de España).

Glosario Estadísticas (Banco de España).

Glosario Sistemas de Pago (Banco de España).

Glosario Política Monetaria (Banco de España).

Glosario Mercado de Deuda Pública (Banco de España).

Glosario para inversores (Bolsas y Mercados Españoles, BME)

Glosario de productos financieros derivados (Instituto de BME)


La opinión general dice que tenemos conceptos claros si sabemos expresarlos de forma precisa y sencilla, como los encontramos en los glosarios anteriores. Para llegar a ello, necesitamos reunir suficiente conocimiento y en este empeño son muy útiles los diccionarios, obras de referencia que amplían y clarifican significados en sus líneas esenciales.

Comparto los tres siguientes y, como en el caso de los glosarios citados, sirven como pista para encontrar y valorar otros:

Diccionario económico de Expansión

Diccionario de Economía: glosario económico de ElEconomista.es

Diccionario de Economía y Finanzas de Carlos Sabino (eumed.net)


Espero que te gusten y te sirvan.





miércoles, 24 de agosto de 2016

De dónde provienen los activos propios y cuándo contar con activos ajenos a través del endeudamiento. Indicadores


Las cosas no funcionan solas ni tampoco sirve el «todos lo hacen así» o «siempre se ha hecho así». Ni esos todos están en nuestra casa o proyecto para sacarlo adelante, sino que estamos nosotros, y cada uno somos una historia y vida diferentes, ni tampoco las cosas son iguales siempre ni las mismas en todas partes. Finanzas son la prosa de la actividad: en una opinión bastante extendida, no son simpáticas, ¡pero tampoco las conocemos bastante! Como otras cosas, a menudo parecen ser la patata caliente que se evita.

Hoy te propongo este artículo que se titula «Análisis financiero. Una herramienta clave para una gestión financiera eficiente» y lo ha escrito Marbelis Alejandra Nava Rosillón. Se publica en la Revista Venezolana de Gerencia, editada por la Universidad del Zulia, en Maracaibo.

Extracto dos apartados aquí, tomados de las páginas 615 a 618, porque conectan con la orientación práctica que se trata de dar a las finanzas y con los inseparables compañeros de operaciones financieras, la banca, con quien habremos de contar para lo cotidiano, como domiciliar un recibo como nos pide un proveedor, hasta lo extraordinario de suscribir una póliza de crédito.

Vamos allá, de la mano de Marbelis Alejandra Nava Rosillón y sus explicaciones claras como el agua clara, concisas, precisas y agradables de leer, y si el tema nos toca en primera persona, ¡seguro estaremos con las antenas desplegadas para quedarnos con todo!



EFICIENCIA EN LA ACTIVIDAD EMPRESARIAL

En toda actividad empresarial es indispensable conocer la eficiencia con la que se utilizan los insumos, los activos y se gestionan los procesos; por ello es importante destacar que la eficiencia está referida a la relación que existe entre el valor del producto generado y los factores de producción utilizados para obtenerlo.

No obstante, existen indicadores de eficiencia que miden el nivel de ejecución del proceso productivo, centrándose en el cómo se realizan las actividades y en el rendimiento generado por los recursos utilizados.

El análisis financiero permite medir la eficiencia con la cual una organización utiliza sus activos y otros recursos, mediante los denominados indicadores de eficiencia o actividad; los mismos están enfocados básicamente a determinar la celeridad con la que cuentas específicas se transforman en ventas o efectivo; es decir, son valores que muestran que tan efectivamente son manejados los activos totales, activos fijos, inventarios, cuentas por cobrar, el proceso de cobranzas y cuentas por pagar.

Entre los indicadores de eficiencia o actividad se encuentran la rotación de activos totales, rotación de activos fijos, la rotación del inventario, rotación de las cuentas por cobrar, el período promedio de cobro y el período promedio de pago (Figura 2).



La rotación de activos totales indica la capacidad que posee una empresa para la utilización de sus activos totales en la obtención de ingresos; es decir; está referida a la eficiencia en el manejo de activos para generar mayores ventas. Está expresada en el número de veces que una empresa renueva sus activos totales durante un ejercicio económico determinado; mientras más alta es la rotación de activos totales mayor resulta el nivel de eficiencia en el uso que hace la empresa de los bienes y derechos que posee.

De igual manera, la rotación de activos fijos expresa la eficiencia de la empresa para generar ingresos a través de la inversión que realice en activos fijos (edificaciones, instalaciones, maquinarias, equipos). Es un valor que expresa el número de veces que la empresa renueva sus activos fijos en un año; mientras mayor resulte el valor de este indicador, implica una utilización más eficiente de los bienes que posee la organización.

Un aspecto de singular importancia radica en que los inventarios, en cualquier organización, constituyen la cantidad mínima de productos o artículos disponibles que se requiere para satisfacer la demanda de los clientes; razón que denota la relevancia de determinar la rotación de inventarios, la cual mide la liquidez del inventario disponible; es decir, refleja la capacidad de la gerencia de convertir eficientemente el inventario en efectivo o cuentas por cobrar. Este es un indicador que expresa el número de veces que se rota el inventario en un año; mientras más alta sea la rotación del inventario significa que en la empresa se gestiona eficientemente y se mantiene constantemente mercancía nueva; contrario a esto, el mantenimiento de bajo inventario se traduce en productos y artículos obsoletos; por ello, la rotación de inventarios permite conocer el manejo del mismo, detectando las ineficiencias que puedan existir en su gestión.

La rotación de las cuentas por cobrar proporciona información acerca de la cantidad de veces que, en promedio, las ventas a crédito son cobradas, durante un período de tiempo específico, convirtiendo su saldo en efectivo. Van Horne [y Wachowicz] (James Van Horne y John Wachowicz, Fundamentos de Administración Financiera, Prentice Hall) señalan que este indicador muestra el número de veces que las cuentas por cobrar han sido transformadas en efectivo reflejando el éxito de la empresa en el reembolso de sus ventas a crédito. Si este indicador alcanza un valor alto sugiere el establecimiento de políticas de cobro gestionadas en forma eficiente. En tanto, el período promedio de cobro se refiere a la cantidad de tiempo promedio en que una empresa recupera sus ventas a crédito; es decir, el número de días en que el efectivo generado de las ventas a crédito permanece en manos de los clientes. El período promedio de cobro, generalmente, es de 30 días, sí este indicador alcanza un valor muy alto o muy bajo es desfavorable para la empresa, ya que puede sugerir ineficiencias en las políticas de crédito y de cobro.

En cuanto al período promedio de pago, Brigham y Houston (Eugene Brigham y Joel Houston, Fundamentos de Administración Financiera, Cengage Learning Editores) plantean que es el tiempo promedio transcurrido entre la compra de materiales, mano de obra y el pago en efectivo de esa compra. En términos generales, es un indicador de eficiencia que expresa es el tiempo requerido por una empresa para cancelar sus compromisos o compras a crédito; esto se traduce en el número de días que una empresa tarda en pagar sus deudas. Su cálculo es importante para la evaluación de la empresa solicitante de compras a crédito, ya que permite determinar que está en capacidad de pagarlas a tiempo.



CAPACIDAD DE ENDEUDAMIENTO

Antes de tomar la medida de hacer uso de financiamiento, el gerente financiero debe revisar la capacidad de pago de la empresa; pues, es la manera de determinar el volumen máximo de endeudamiento en que esta se encuentra.

No obstante, la situación de endeudamiento de una empresa indica el monto de dinero que terceros aportan para generar beneficios en una actividad productiva. Esto se traduce en que el nivel de deuda de una empresa está expresado por el importe de dinero que realicen personas externas a la empresa, llamadas acreedores, cuyo uso está destinado a la obtención de utilidades.

Este nivel de deuda puede ser determinado mediante el análisis financiero, el cual se fundamenta en el cálculo y aplicación de una serie de indicadores o razones financieras que miden la capacidad de una empresa para adquirir financiamiento, estableciendo sí ésta puede ser financiada por sus accionistas o por acreedores; asimismo, evaluar la capacidad que presenta para cumplir con las obligaciones contraídas con terceras personas tanto a corto como a largo plazo.

Entre los indicadores de endeudamiento más destacados se incluyen: razón deuda, razón pasivo circulante y pasivo total, razón pasivo a largo plazo y pasivo total y razón cobertura de intereses (Figura 3).



La razón deuda refleja la proporción de activos totales financiados por los acreedores de la empresa y mientras más alto sea su valor significa que los acreedores han aportado una gran suma de dinero para las operaciones empresariales esperando obtener beneficios.

La razón pasivo circulante y pasivo total, simplemente expresa la proporción de los pasivos totales correspondientes a las deudas o pasivos cuyo vencimiento es menor a un año; en tanto, la razón pasivo a largo plazo y pasivo total indica la proporción de los pasivos totales contraída por obligaciones a ser canceladas en un lapso de tiempo mayor a un año.

En cuanto a la razón cobertura de intereses, arroja un valor que refleja la capacidad de la empresa para cancelar los intereses del endeudamiento incurrido, mientras más alto sea este valor mayor será la capacidad de la empresa para pagar.

Ahora bien, el gerente financiero presta mayor atención a las deudas de largo plazo, ya que estas significan el compromiso de la empresa para cancelar los intereses en el transcurso del tiempo y el capital en la fecha correspondiente al vencimiento. Por su parte, los accionistas o propietarios enfatizan en su capacidad de reembolsar el monto de la deuda; mientras que los acreedores se interesan por el grado de endeudamiento de la empresa, ya que en la medida que el nivel de deuda sea mayor, la probabilidad de que la empresa no esté en condiciones de cumplir con el pago del capital más los intereses también será mayor.

Sin embargo, utilizar financiamiento tiene sus implicaciones sobre el riesgo y el rendimiento en cualquier empresa; puesto que la inversión de los accionistas será limitada aún cuando mantengan el control sobre su empresa, los acreedores visualizan el capital de los propietarios para disponer de un margen de seguridad, dado que corren con el mayor riesgo dentro de la empresa y por último, el rendimiento sobre el capital de los propietarios se puede incrementar o verse apalancado sí la empresa logra un mejor rendimiento sobre las inversiones financiadas por medio de préstamos en relación al interés pagado sobre los mismos.





Marbelis Alejandra Nava Rosillón: 📄🎓 Análisis financiero. Una herramienta clave para una gestión financiera eficiente




Revista Venezolana de gerencia, vol. 14, núm. 48 (2009).

NOTA: La carga del documento en el marco se demora unos segundos. ¡Gracias por tu paciencia unos segundos!






martes, 23 de agosto de 2016

Finanzas, programa de verano 2016


¡Hola de nuevo!, ¡bienvenida, bienvenido! Hola, hola, terminando agosto, después de este tiempo haciendo la experiencia de no tuitear ni bloguear, una vez finalizado el curso.

Curso, vacaciones… y ahora el blog tendrá verano, coincidiendo con la estación del verano en estas latitudes. El próximo mes bloguero será el tiempo previo al curso, que arranca con octubre, por acuerdo tácito generalizado. Durante estas próximas semanas de precurso el plan temático será diferente y he elegido una línea de finanzas …¡Espera!, ¡¡no te vayas!!, ¡vuelve, que son finanzas amigables!, y también ¿smart?, ya que habrá lugar para el análisis, para usar la cabecita, la inteligencia, eso es smart, y también tendrán espacio las finanzas inclusivas, sociales.

La crisis en la que vivimos desde hace años ha echado raíces y crecido alrededor de un mal producto bancario y mal vendido; las muy cuestionables prácticas comerciales (pero no solo bancarias), la ignorancia, los prejuicios, etc. etc. etc. han jugado sus cartas y la banca ha hecho crack. Las cosas han terminado ahí para muchas personas y la banca ha seguido con su vida en medio del desastre. Ahora tiene nuevos planes y, por ejemplo, ya no quiere depósitos: hace pagar por su custodia a las grandes empresas, persuade a los ahorradores de no efectuarlos, etc. En definitiva, quiere que seamos inversores y que el dinero «se mueva».

Pero la cuestión es que el dinero no se mueve, lo mueven las personas; el dinero por sí solo y por sí mismo no hace nada de nada, por eso en tu banco se dirigen a ti, quieren persuadirte a ti, etc., en lugar de abrir la caja fuerte y propinarle el speech comercial a su contenido. Es claro, ¿no? Por eso también habrá NER en este precurso dedicado a finanzas, porque el dinero sin las personas no vale para nada, sin todas las personas.



Como cualquier otro asunto de nuestra vida, las finanzas merecen al menos un rato del día durante una temporada de vez en cuando, te propongo este recorrido que espero que te guste y que, como te decía, compartirá cuatro aspectos, uno cada día de martes a viernes, hasta el 30 de septiembre: conceptos financieros, análisis financiero y finanzas inclusivas.

Empecemos por el principio que marcan los siguientes portales de agentes principales en la vida económica del Estado español.


Finanzas para todos (Plan de Educación Financiera de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, CNMV, y el Banco de España).

Portal del Cliente Bancario (Banco de España).

Portal Educativo (Banco de España).

Gepeese (Comisión Nacional del Mercado de Valores, CNMV, y Banco de España).