Una entrevista a Anna Wintour, directora de contenidos globales de Condé Nast, abrió esta semana. Wintour ofreció el retrato del ejecutivo neoyorkino políticamente correcto: madrugador, ejercicio, lectura, cortar con el trabajo para dedicar tiempo a la familia. Todo convencional hasta llegar a cuestiones de gerencia (se guía por su intuición, no por las analíticas de datos) y de personal (es mentora de los más jóvenes en la plantilla, pero no le importa su currículum, solo se pregunta si le gustaría ir al trabajo cada día y encontrar allí a esa persona). Escuchar y aprender son términos fuertes en su relato.
También menciona la satisfacción de ayudar mediante la plataforma CFDA/Vogue Fashion Fund, creada después de los atentados del 11 de septiembre de 2001 (How September 11 Changed American Fashion), colaboración entre el CFDA (Council of Fashion Designers of America / Consejo de los Diseñadores de Moda de América) y Vogue proporcioando mentoría y financiación a los jóvenes diseñadores. Posteriormente, durante la pandemia global por COVID-19, la misma entidad ayudó de nuevo a diseñadores afectados por la emergencia sanitaria, en esta ocasión con una campaña de donaciones impulsada por la videoserie en YouTube titulada La amenaza común (The Common Thread) y presentada por Anna Wintour en Vogue (nada menos que el 24 de marzo de 2020, una reacción temprana).
El martes volvieron el aprendizaje continuo y la capacidad de reacción en las organizaciones, tanto como cualificación profesional como por respuesta a su vez a la respuesta que da el mercado. Ambos son objetivos deseables, pero ¿cuál es el momento de emprenderlos? Las características del contexto que rodea a la organización pueden ayudar a elegirlo.
Entre los aprendizajes, uno que a menudo se descuida es el económico-financiero, cuando la realidad requiere tener en cuenta este conocimiento en todo, es decir, continuamente.
En este momento de crisis económica, algunas organizaciones se plantearán poner en el mercado nuevos productos y servicios con un precio especialmente asequible, que también supondrá un menor coste de desarrollo. Por cultura interna, unas organizaciones estarán mejor preparadas que otras para llevar a cabo con éxito esta innovación frugal.
Los aspectos que mejorar y sus causas llevan a una pyme a elegir entre cambio organizativo o rectificación parcial. El hecho de pensar mejorar o rectificar es beneficioso y una útil forma de control.
⬇️ Y así han sido estos días de blog y de @aldomanucio_ en X (Twitter).
El conocimiento que da la cercanía al cliente y a la comunidad
https://lidece.blogspot.com/2025/12/el-conocimiento-que-da-la-cercania-al.html lunes
Para no parar de aprender y estar prontos a pivotar
https://lidece.blogspot.com/2025/12/para-no-parar-de-aprender-y-estar.html martes
Progreso organizativo en y con aprendizaje financiero
https://lidece.blogspot.com/2025/12/progreso-organizativo-en-y-con.html miércoles
Innovación frugal y cuatro culturas organizativas
https://lidece.blogspot.com/2025/12/innovacion-frugal-y-cuatro-culturas.html jueves
Cambiar o rectificar parcialmente
https://lidece.blogspot.com/2025/12/cambiar-o-rectificar-parcialmente.html viernes






